A las 5h. toca diana, estamos todos ya ansiosos por llegar.
La etapa no es muy larga y aunque al principio queríamos
llegar todos juntos, Beli no tarda en
quedarse atrás.
Lo mas duro de hoy es una cuesta que subimos en ayunas, no se
que coño pasa en Galicia con los bares, todos cerrados (esto en Málaga no pasa). 
Miguel y Domi tiran mas fuerte, y el Heavy y yo nos lo
tomamos con mas calma.
Nos esperábamos una etapa fea, pero no nos lo resulta tanto.
Subimos cuestas cómodas y pasamos por los estudios de las televisiones para
terminar en el Monte do Gozo, una pasada. Allí nos esperan Miguel y Domi, nos
hacemos fotos, vemos Santiago a lo lejos por primera vez en el camino y parece
que ya no nos duele nada.
La bajada se nos hace cortísima y vamos entrando emocionados
en las calles de Santiago, cantando y haciendo notar nuestro origen malagueño.
Por fin la
Plaza del Obradoiro y la catedral de Santiago, abrazos,
fotos y a por la merecida Compostela.
Hoy todo es alegría, hemos llegado, objetivo cumplido y con
creces, se puede decir que todo ha salido perfecto, las gentes que conoces, las
cosas que ves y que sientes, los momentos de pensar, todas estas cosas forman
un cúmulo que hace que entiendas que sí, que ha merecido la pena correr esta
aventura llamada Camino de Santiago, y que no importa tanto el llegar sino
disfrutar del camino.
Ahora toca celebrarlo con nuestros catalanes hasta que el
cuerpo aguante.
Espero no olvidarme nunca de la gente que aquí hemos conocido:
Lehendakari, madrileño, la perito, el canario, Pablo, Bea, Marina, el primo del
Pulga, Elsa, las pijas, Carlos y su padre, el matrimonio y el niño de Rivadiso,
Julia. Esto es el camino.
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